Miri, Moi y los clicks toman el Castillo

¡Hola, aventureros!

Vamos a empezar a darle vidilla al blog y lo vamos a hacer compartiendo con vosotros la peculiar ruta que hicimos este viernes. Seguro que os encanta.

Quienes estuviérais en Alicante este viernes día 13 sabréis que amaneció un día muy feo. Durante la noche habían caído pequeñas lluvias puntuales de 5 minutos y por la mañana el cielo estaba oscuro desde primera hora. Habíamos quedado con unos amigos para subir al Castillo a ver la exposición de Playmobil de la que luego os hablaré. Por momentos parecia que el plan sería cancelado, pero no fue así. Subimos para arriba y, aunque nos cayeron unas pocas gotas, obtuvimos unas cuantas recompensas. 

La primera de ellas fue una vista espectacular del mar donde se podía ver cómo llovía mar adentro, a varios kilómetros a lo lejos. Normalmente subimos a la zona de la Ereta bien temprano, cuando está amaneciendo y hace un día normal, con un cielo claro y despejado. Ver cómo empieza a pegar el sol en la ciudad despertándola es maravilloso, nunca nos cansamos de verlo y hacer una foto de rigor con el móvil. Pero esta vez era diferente, estaba todo oscuro, el mar parecía empezar a enfurecerse y las lejanas lluvias que se entreveían eran signo de mal tiempo, aunque desde nuestra perspectiva se antojaba un paisaje extrañamente poético. Os adelanto que no nos llovió y el día fue clareando poco a poco, hasta salió un tímido sol. Siendo esto así seguro que adivináis cuál fue la segunda recompensa. Efectivamente, subimos con un día nublado, sin que el sol nos dificultara la subida. Algún día os hablaremos de los diferentes caminos que podemos tomar para subir al Castillo, pero de momento vamos a centrarnos en lo que fuimos a hacer allí.

Ya os confesamos en el post de presentación que somos un poco frikis, así que no podíamos faltar a esta cita. De hecho, no sé por qué no habíamos ido antes. Desde finales de marzo se puede visitar la exposición "Los clicks toman el Castillo" en uno de los edificios del patio de armas del Castillo. La entrada cuesta 4 euros, pero merece la pena gastárselos. Además, incluye la visita a otras dos exposiciones.

Seguro que muchos de los que nos leeis habéis jugado de pequeños con muñecos de Playmobil, e incluso algunos de mayores seguís siendo fanáticos de estos juguetes. El caso es que a buen seguro que estos entrañables personajes no os dejan indiferentes, por eso esta exposición es una buena apuesta para disfrutar aun más de nuestro Castillo.

Dos plantas albergan varias vitrinas con dioramas (creo que eran 12 en total) que cuentan la historia de nuestra ciudad desde la Prehistoria hasta la actualidad. Todas las civilizaciones que llegaron a la ciudad están representadas en su respectiva vitrina por decenas de clicks, componiendo una escena muy simpática. Quizá en nuestra infancia no fuera así, pero ahora existen muñecos de todo, así que están todos los detalles muy cuidados. Estas escenas de las que os hablo quizá sean aplicables a más de una ciudad, no exclusivamente a Alicante, por eso los organizadores han incluído unas cuantas vitrinas con lugares emblemáticos de nuestra ciudad. Desde luego que son toda una sorpresa. No os esperéis algo grandioso porque al usar clicks hay ciertos límites, pero sí he de admitir que nos sorprendieron gratamente esos escenarios del pasado y del presente de nuestra ciudad por su originalidad. Nuestra descripción y aportación fotográfica es más bien escasa porque no queremos desvelar toda la exposición por si alguno de vosotros quiere ir. Ya os decimos que os puede parecer algo escaso el número de vitrinas porque uno siempre quiere más, también puede que echéis en falta escenas y lugares, no os vais a encontrar una Cara del Moro, por ejemplo, símbolo de nuestra ciudad; pero si os gustan los Playmobiles vais a salir encantados de allí como nosotros. Ya os digo que nuestra sensación fue muy positiva.

¿Adivináis qué es esto? :)

"¡Senyor pirotècnic, pot començar la mascletà!"

Lamentablemente, esto es algo que también caracteriza a nuestra ciudad

Y eso no es todo. Con vuestra entrada también podéis visitar otras dos exposiciones que se encuentran vigentes ahora en el Castillo. La primera es de instrumentos de muerte y tortura medieval. Está en una sala muy pequeña y no tiene muchas cosas, pero las pocas que hay ya te quitan las ganas de almorzar porque dan mucho repelús. La segunda exposición es la del famoso tesoro de Villena, tesoro incluído, y sobre cómo lo encontraron. Ambas salas son curiosas de ver y junto con la de Playmobil hacen que merezca la pena invertir esos 4 euros. Os dejo más abajo más información sobre horarios y demás que os pueda resultar de utilidad.

¡Uno de los clicks lleva mi nombre!

Por cierto, si vais a la exposicón de los clicks, que no os extrañe encontraros de repente un buzo entre romanos o cavernícolas. Es que hay escondidos dos buzos entre toda la exposición y si los encontráis podéis participar en el sorteo de juguetes de Playmobil. Lo de romanos y cavernícolas es un decir....o no... jejeje.

Hasta aquí la visita a las exposiciones. Lo bueno de que estén en el Castillo es que, al terminar, uno siempre puede seguir subiendo y disfrutar de las vistas. Subir al Castillo siempre es muy agradable, pero si además tenemos una oferta tan divertida como la que os he venido a contar hoy aquí, la recompensa es mayor. Os animo a que vayáis. ¡Tenéis de tiempo hasta marzo de 2014!

¡Nos vemos en el próximo post!

Miri


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